En el mundo tecnológico es difícil hablar de clásicos que no pasan de moda, pues aunque la mayoría de los elementos que utilizamos siguen ahí: teléfonos, televisores, radios, consolas de videojuegos; todo ha evolucionado.
Sin embargo, lo que no cambia son las experiencias y es ahí, donde cada uno de estos dispositivos y algunas de sus características nos hace sentir un apego especial por la comunicación, el consumo de entretenimiento, escuchar música o programas y disfrutar muchas cosas.
Casi como cuando disfrutas de una deliciosa Cuarto de libra de McDonald's.
Comunicación: Del teléfono a los smartphones
Escuchar la voz de nuestros seres queridos y mantenernos en contacto con ellos a pesar de no estar cerca, ha sido una necesidad constante a lo largo del tiempo.
Es por ello que, aún antes de la invención del teléfono electromagnético, ya se había buscado la manera de transmitir la voz humana a distancia con elementos acústicos. Sí, hablamos del humilde pero muy funcional sistema de dos latas unidas por un alambre, prototipo en el que el físico Robert Hooke trabajó desde 1664, el cual fue conocido en su momento como “Lover’s phone”, siendo considerado como el génesis de lo que sería esta nueva forma de conectarnos con el mundo.
Y es que, retomando la base de este aparato, así como las ideas de muchos otros famosos personajes –como Thomas Alva Edison, Antonio Meucci o Elisha Gray–, Alexander Graham Bell consiguió en 1876, envuelto en algunas controversias, la patente de un revolucionario invento que nos permitiría romper las barreras de la comunicación a distancia: el teléfono.
Fue así que década tras década, este dispositivo se convirtió en parte importante del día a día de millones de personas, que lo adoptaron e hicieron parte de su vida.
Tanto, que en 1963 evolucionó del antiguo modelo de disco a un teclado digital, gracias a John Elias Karlin, un psicólogo sudafricano que ideó el sistema “123”, maximizando la velocidad de marcación ya que realmente se apegaba a las preferencias del usuario.
Siendo ya más un aliado para relacionarnos, que un simple objeto, el teléfono se adaptó a las necesidades del mundo moderno y en 1973 se convirtió en un aparato no sólo inalámbrico, sino también portátil, que nos permitió una mayor libertad de movilidad. Fue así como nacieron los primeros teléfonos celulares.
Estos, sin perder la esencia de un dispositivo para comunicarnos. Los clásicos evolucionan, mejoran, pero siguen siendo clásicos.
Actualmente se han vuelto multi-funcionales, permitiéndonos capturar momentos especiales con sus cámaras, expresar nuestros gustos e identidad en las redes sociales, e incluso facilitarnos la vida para disfrutar de esos sabores que no pasan de moda, como nuestra hamburguesa favorita –tal vez una clásica Cuarto de libra de McDonald's–, a través de apps.
¿Quieres algo clásico y al mismo tiempo innovador? Aprovecha que hasta el 31 de marzo, también están disponibles la Cuarto de libra con tocino y con tocino, lechuga y tomate.
Consumo de entretenimiento: de la televisión al streaming
Disfrutar de una buena película o serie es un clásico que no pierde vigencia. Y la tecnología que nos lo permite sólo ha evolucionado, pero en esencia, sigue siendo la misma.
Si bien desde 1897 el físico Karl F. Braun construyó la primera pantalla fluorescente que podría considerarse la bisabuela de la televisión como ahora la conocemos, la historia de este fantástico aparato inicia formalmente en 1926, cuando John Logie Baird logra la primera transmisión televisiva.
En 1936, la BBC de Londres inició la primera transmisión pública regular en el mundo, y para 1937 sorprendió al mundo televisando la coronación del Rey Jorge VI. Por supuesto, ese solo fue el inicio, ya que con el paso del tiempo, se crearon programas especialmente pensados para este novedoso formato, que lograron capturar la imaginación de los espectadores, quienes pronto hicieron de “las tardes de tele” una costumbre que se convirtió en un clásico, pues reunía a amigos y familiares en torno a este aparato.
Curiosamente, fue un mexicano quien consiguió marcar otro hito en torno a esta tecnología: el ingeniero Guillermo González Camarena, llenó de color la pantalla chica con su revolucionario sistema tricromático que invento en 1940.
Durante el siglo XX, la televisión tuvo grandes cambios estructurales, con aparatos cada vez más sofisticados, ofreciendo controles remotos que sustituyeron a las antiguas perillas para cambiar canales, desarrollando nuevos sistemas de transmisión y maximizando la resolución de las pantallas, con el fin de proveer una experiencia aún más disfrutable a los usuarios.
Hoy en día la televisión se ha transformado al ser capaz de conectarse a Internet, abriendo un mundo de posibilidades a los espectadores, quienes más que nunca, tienen una amplia gama de contenidos a su disposición para disfrutar en la comodidad de su casa.
La experiencia en el consumo de entretenimiento sigue siendo clásica, aunque la tecnología haya evolucionado.
Música en el alma: de la radio clásica al podcast
La música nos une y es por ello que la radio continúa teniendo gran vigencia en el mundo actual y nos acompaña cotidianamente.
Pero para que esto sucediera, en 1888 el físico alemán Heinrich Hertz debió demostrar que es posible transmitir energía eléctrica a través del aire y el científico italiano Guglielmo Marconi tuvo que idear la forma de usar las ondas hertzianas para enviar señales en clave Morse.
Gracias a esos descubrimientos, el canadiense Reginald Aubrey Fessenden logró la primera transmisión radiofónica pública en la Nochebuena de 1906 al emitir la canción clásica “O’ Holy Night”, sentando así las bases de la radio
Ya en 1920, arrancaron las transmisiones de entretenimiento, llegando a miles de hogares en donde grandes y chicos disfrutaban de programas de variedades, así como selecciones musicales de la época.
En 1933, Edwin H. Armstrong patenta el primer sistemas basado en modulación de frecuencia (FM) que complementaron a los de modulación en amplitud (AM), permitiendo que el sonido sea más puro gracias a la reducción de estática.
La necesidad de portabilidad hizo que en los años 50, naciera la radio de transistores, con aparatos pequeños que los llevaron fuera de las cuatro paredes de las casas.
A lo largo de las décadas, esta tecnología se fue perfeccionando, entrando al campo digital y satelital en los 90. En épocas más recientes, y con el boom de Internet, la radio hablada se apropió de otros formatos como el podcast, que logró que la gente pasara de la experiencia compartida de escuchar la radio en la sala de su casa, a poder oír aquellos temas que son de su interés en el momento que se quiera.
Como ves, a pesar de la evolución tecnológica, las experiencias que nos provocan siguen teniendo ese sabor clásico que no pasa de moda y que siempre nos lleva a volver a revisitarlas, como ocurre con la deliciosa Cuarto de libra de McDonald's (hasta el 31 de marzo también disponibles la Cuarto de libra con tocino y Cuarto de libra con tocino, lechuga y tomate).
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