Los rumores se cumplieron. Nvidia cancela definitivamente la compra de Arm. La principal causa de la cancelación del acuerdo se debe, según las partes involucradas, a "importantes desafíos regulatorios" que no permitieron la consumación de la transacción.
SoftBank, dueño de Arm, recibirá 1,250 millones de dólares por la ruptura del acuerdo, a modo de compensación, pero además comenzará los preparativos para una oferta pública de acciones de Arm.
Presión de los reguladores
La adquisición de Arm por parte de Nvidia no fue bien vista desde que se anunciaron las intensiones de compra a finales de 2020. Los organismos reguladores de Estados Unidos, Europa y Reino Unido iniciaron investigaciones alrededor de la transacción, argumentando principalmente que Nvidia tomaría una posición demasiado ventajosa en el mercado de semiconductores, en donde Arm es gran protagonista por sus diseños.
Aún así, Jensen Huang, CEO de Nvidia, menciona que seguirá colaborando y apoyando a Arm pues según él "espera que sea la arquitectura de CPU más importante de la próxima década".
Además, la presión para evitar que la compra se apruebe también venía de la competencia. Empresas como Qualcomm y Microsoft se pronunciaron en contra de las intenciones de adquisición de Nvidia por la importancia de Arm en el diseño de chips móviles y para computadoras.
Ya desde hace algunas semanas se dejaron escuchar rumores de la cancelación del acuerdo entre Nvidia y SoftBank, y al final resultaron ser verdaderos. De esta manera se cae una adquisición que prometía ser una de las más importantes en la historia de la tecnología, valuada en su momento en 40 mil millones de dólares.
