Otro cohete de China caerá sin control de regreso a la Tierra, y de nuevo, una de sus trayectorias estimadas pasa por México

Cohete Chino
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Actualización 4/11/2022: El propulsor finalmente ha caído en el Océano Pacífico, y hay estimaciones de que restos pudieron caer en México, en Puerto Escondido, Oaxaca, o hasta en Tabasco.

Actualización 3/11/2022: The Aerospace Corporation ha reducido la posible trayectoria del cohete chino, y hasta la última revisión, México sigue encontrándose dentro de las posibles locaciones donde puede caer el propulsor.

En julio de 2022, un cohete Long March 5B que llevaba un módulo de la Estación Espacial China cayó sin control de regreso a la Tierra. Ahora, la historia se repite nuevamente, luego de que el país lanzara nuevamente el cohete el 31 de octubre con la última y tercera parte de su primera etapa, "Mengtian" de su instalación espacial.

De acuerdo con Aerospace Corporation, que se dedica a rastrear este tipo de objetos, dando actualizaciones periódicas, se tiene contemplado que este nuevo Long March B5 realice un reingreso descontrolado en la atmósfera de la Tierra el próximo 4 de noviembre, y sí, nuevamente México se encuentra de momento entre las trayectorias que el cohete podría tomar.

Aerospace Corporation detalla que la hora específica para este evento está contemplada para las 7:38 pm del viernes 4 de noviembre, hora del centro de México, aunque de momento existe un margen de más menos 16 horas, que eventualmente se estará reduciendo hasta que el cohete termine estrellándose.

Eso sí, de momento es muy pronto para determinar exactamente la zona donde caerá, y también hasta dónde se extenderá la huella de escombros cuando el cohete empiece a desintegrarse.

Un cohete "a la deriva"

Recordemos que la mayoría de etapas de cohetes caen de nuevo a la Tierra de forma controlada, ya que no están diseñadas para llegar a la órbita, porque sus trayectorias de despegue se hacen de tal forma que casi siempre caen en zonas seguras en el océano.

Sin embargo, en el caso de estos cohetes Long March 5B utilizados para llevar el módulo hasta la órbita de la estación, y no tener capacidad de controlar su reingreso, no pueden realizar propiamente maniobras de salidas para ajustar su caída y "apuntar" a regiones seguras, minimizando así los riesgos.

Para este tipo de eventos, se espera que entre el 20 y 40% de la masa de un objeto grande sobreviva al reingreso y logre llegar a la superficie, y con el Long March 5B, se estima puedan caer en tierra entre cinco y nueve toneladas métricas, y que sean principalmente componentes como algunos tanques o componentes del motor.

El último cohete, que regresó a la Tierra el 30 de julio, si dejó restos en zonas pobladas, principalmente en Malasia e Indonesia, entre los que se encontraban anillos metálicos de hasta cinco metros de diámetro y piezas que provocaron la evacuación de familias.

Imagen: CNSpaceStation

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