Hablar de la tradición del Día de Muertos en México significa hablar de misticismo, simbología e historia, una que se ha forjado desde la época prehispánica y que hoy sigue escribiéndose en cada núcleo familiar. Es una tradición con raíces y sentimientos profundos que acompaña a los mexicanos desde su más tierna infancia, gracias a las historias y enseñanzas de los padres y los abuelos. Una tradición, que no es fácil de ser entendida por quienes no han crecido en esta tierra.
Su grandeza es tal, que es la festividad mexicana más conocida en el mundo entero. De allí, que Pixar, uno de los más importantes estudios cinematográficos, haya decidido usarla como temática para una su más reciente filme. Pero 'Coco', no es la primera película de animación basada en El Día de Muertos, y tampoco será la última.
Al ver 'Coco', es inevitable recordar la película del 2014 producida por Reel FX Creative Studios: The Book of Life que comparte con la de Pixar no solo la ambientación en la festividad del Día de Muertos en México sino también el mensaje de que en nuestra vida debemos perseguir nuestros anhelos.
Así es 'The Book of Life'
Producida por Guillermo del Toro, dirigida por Jorge R. Gutiérrez, y con una importante participación de actores mexicanos, The Book of Life pretende mostrar la riqueza de México a través de su cultura y de su gente. Las referencias a nuestras tradiciones, a nuestra música y a nuestra vida cotidiana son múltiples, y se convierten en el marco perfecto para una historia de amor y de aventura.
Nos presenta la historia de Manolo Sánchez, un niño apasionado por la música que se ve obligado por su padre viudo y su abuela, a continuar con la tradición familiar de ser toreros. Comparte protagonismo Joaquín quien toda su vida a anhelado ser un héroe como lo fue su padre. Ambos, amigos de infancia, luchan por el amor de María Posada, hija del alcalde del pueblo de San Ángel, que tras su estancia en España, regresa a su pueblo justo el día de la primer corrida de toros de Manolo, a quien de niño le regaló una guitarra y que siempre le recuerda tocar con el corazón.
Pero lo que ellos no saben es que La Catrina y el señor de Xibalbá, han hecho una apuesta sobre quién de los dos se casará con ella, poniendo de por medio la Tierra de los Muertos donde reina La Catrina y la Tierra de los Olvidados donde rige Xibalbá.
Es aquí donde nos adentran, muy superficialmente, a la tradición de Día de Muertos y al misticismo que conlleva. El padre de Manolo busca mantener vivo el recuerdo de su esposa y madre de su hijo, enseñándole además la importancia del compartir lo que tenemos tanto con vivos como con los muertos que nos visitan el 2 de Noviembre. En la escena vemos altares en los panteones, llenos de la luz de las velas y el infaltable pan de muerto. A la Muerte vestida de fiesta, como nos la retratara el caricaturista José Guadalupe Posada y llamada Catrina como lo hiciera Diego Rivera.
El nombre de Xibalbá quizá a muchos nos parezca inventado, pero en realidad es una referencia a la mitología maya y es como se nombra al inframundo, mismo que es regido por los dioses de la enfermedad y de la muerte.
La trama de la historia lleva a Manolo a conocer la Tierra de los Recordados, donde se reencuentra con su familia y donde descubre la apuesta hecha por la Catrina y Xibalbá, junto con la trampa de éste último. Con tal de volver a ver a María y de salvar a su pueblo que está amenazado por el Chacal y el olvido, Manolo decide ir a la Tierra de los Olvidados para encontrarse con la Catrina y buscar su ayuda para regresar a la Tierra de los Vivos.
En esta parte de la película, nos encontramos también ante el sincretismo de las tradiciones prehispánicas con el catolicismo: el personaje de el Hombre de Cera, un ser que puede ver la vida y las historias de los vivientes y que es guardián de el Libro de la Vida, mismo que es mencionado en el Apocalipsis y que es referido en diferentes textos tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento.
'Coco' ¿una película similar?
En Coco, nuevamente vemos como protagonista a un niño cuyo sueño en la vida es ser músico y que al igual que a Manolo, se le anima.a desistir de seguir ese camino. Un niño, que en su intento de encontrar a su ídolo musical, llegará a descubrir y a maravillarse con la Tierra de los Muertos.
Con tan solo 12 años, Miguel ha crecido en el seno de una familia mexicana donde la tradición de Día de Muertos sigue viva. Vemos altares, flores de cempoalxóchitl, panteones iluminados con velas, música de mariachi, y una visión festiva de cómo es la vida después de la muerte de acuerdo a nuestras tradiciones ancestrales.
Aunque el tema de si Coco ha conseguido narrar de manera fiel el Día de Muertos con el misticismo que le rodea y sin caer en la caricaturización es aún sujeto a debate, es innegable la calurosa bienvenida que le ha dado tanto tanto la audiencia global como la mexicana. Tan sólo en México en su primer fin de semana acumuló más de 170 millones de pesos y fue vista por poco más de 3 millones de personas.
Si algún otro estudio conseguirá con una película que verse sobre el Día de Muertos la unanimidad de opinión que público y crítica han dado al más reciente producto de Pixar, sólo el tiempo lo dirá.
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