Los creadores de ARC Riders creen que todos deberían usar IA, pero este desarrollador lo tiene claro: "mejor me corto los brazos"

La inteligencia artificial se ha mantenido en el centro de la polémica prácticamente desde que su popularidad explotó en los últimos años. Para bien o para mal, esta herramienta está cada vez más presente en nuestras tareas cotidianas, trabajos y en cualquier actividad que involucre un dispositivo electrónico moderno, y hasta en las entregas.

Sin embargo, el sector de los videojuegos vive su propia batalla: hay desarrolladores que critican duramente este software, asegurando que prefieren "cortarse los brazos" antes que integrar la IA en sus procesos creativos.

Arc Raiders.

El detonante: las declaraciones de Nexon

Este nuevo capítulo del debate surgió tras las declaraciones de Junghun Lee, CEO de Nexon (empresa matriz de Embark Studios, creadores de The Finals y Arc Raiders). Lee afirmó que “es importante asumir que todas las compañías de videojuegos utilizan IA”, una postura que, si bien intentaba empatizar con el uso de la tecnología, también buscaba defender la “creatividad humana”.

No obstante, sus palabras fueron sacadas de contexto tras una traducción del medio Automaton. Esto provocó una respuesta inmediata y masiva por parte de diversos estudios independientes, quienes rechazaron tajantemente la idea de que la automatización sea un estándar inevitable en la industria.

Una ola de rechazo en la escena independiente

Varios estudios y desarrolladores arremetieron contra la visión de Junghun Lee. Una de las reacciones más contundentes vino de Necrosoft Games, quienes fueron claros sobre su postura ética y técnica:

“Hola, no solo no usamos IA, sino que preferiríamos cortarnos los brazos antes que hacerlo. Demonschool es 100% libre de procesos artificiales”.

A esta voz se sumaron otros estudios con mensajes similares, enfatizando que la tecnología no es una necesidad para la calidad:

“Me complace confirmar que Rogue Eclipse no utiliza IA; de hecho, ¡no se utiliza en absoluto en nuestro proceso! Desaconsejamos su uso y contamos con cláusulas en nuestros acuerdos para prohibirla”.

“La IA no es, ni nunca ha sido, necesaria para crear un buen juego. Los directores ejecutivos que dicen esto no tienen idea de lo que hablan”.

“Solo quieren eliminar poco a poco a los humanos del proceso, pensando que con solo pulsar un botón se generará dinero”.

Este choque de opiniones no es nuevo, pero ha cobrado tal relevancia que plataformas como Steam ya han implementado avisos obligatorios. Ahora, los usuarios pueden saber antes de comprar si un título utiliza inteligencia artificial en su desarrollo.

Entre la resistencia y la adopción tecnológica

Mientras los estudios independientes marcan una línea roja, otros sectores de la industria han decidido abrazar la herramienta. Un caso destacado es el de Embark Studios; su éxito multijugador, The Finals, y el próximo Arc Raiders, utilizan IA generativa específicamente para las voces e interacciones de los personajes.

Por otro lado, estudios como los creadores de Kingdom Come: Deliverance II han adoptado una postura a favor, asegurando que “es hora de afrontar la realidad: la IA llegó para quedarse”. En defensa de Larian Studios (autores de Baldur’s Gate 3), quienes han mencionado que utilizan la IA generativa únicamente como una herramienta para “explorar referencias”, manteniendo el grueso del trabajo en manos humanas.

Baldurs Gate 3.

El conflicto entre la eficiencia algorítmica y la esencia del desarrollo tradicional no parece tener un final cercano. Ya sea modificando el mercado de hardware, como sucede con las memorias RAM, o transformando el código de nuestros juegos favoritos, todo apunta a que la IA es un software con el que el mundo del gaming tendrá que aprender a convivir.