Desde el lanzamiento de Windows 11, algunos usuarios se quedaron sin la posibilidad de acceder a la actualización, ya sea por no cumplir con los requisitos de hardware, principalmente por el chip TPM 2.0, pero también por bloqueos por parte de Microsoft.
El caso en cuestión involucra a Intel, pues tras dos años, ambas compañías lograron resolver los problemas de compatibilidad entre Windows 11 y la tecnología Intel Smart Sound (Intel SST).
Este problema afectaba principalmente a los equipos con procesadores Intel Core de 11a. generación. Tras descubrirse, se aplicó una suspensión de compatibilidad en los sistemas afectados, impidiendo que se actualizaran a Windows 11.
El tema de los controladores
Ahora que el error ha sido solucionado, el siguiente paso será verificar que los equipos cuenten con una versión compatible de los controladores de la tecnología Intel SST antes de cambiar de sistema operativo.
Según Microsoft, si no hay ninguna otra medida de protección adicional necesaria para el dispositivo en cuestión, pueden pasar hasta 48 horas antes de que se les ofrezca la actualización.
Por el momento, la empresa recomienda no forzar la actualización manual, ni con el botón de "actualizar ahora", ni utilizando la herramienta de creación de medios, pues primero se deben verificar que las versiones de los controladores sean correctas.
El final de Windows 10
Recordemos que Windows 10 está cada vez más cerca de su fin, terminando su soporte en octubre de 2025.
Aunque la mejor solución es simplemente actualizar a Windows 11, esta no es una opción para todo el mundo, pues los requisitos del sistema impiden que algunas PC relativamente nuevas puedan instalarlo.
Para aquellos usuarios que no tienen la opción de actualizar, Microsoft reveló un plan para que sigan recibiendo actualizaciones de seguridad tras el fin del soporte, por otros tres años, pero a precios nada baratos, al menos para equipos empresariales.
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