En 2024, el sitio web Sportico publicó una lista con los 50 deportistas más ricos de todos los tiempos. En primer lugar estaba el basquetbolista Michael Jordan, con una fortuna de 3,750 millones de dólares. Le seguía el golfista Tiger Woods, con 2,600 millones de dólares. El tercer puesto fue para el futbolista Cristiano Ronaldo, con 1,920 millones de dólares. Lionel Messi ocupó el sexto puesto, con la modesta suma de 1,670 millones de dólares.
Aunque ganan muchísimo más dinero que la mayoría de los mortales, ni todas sus fortunas juntas podrían rivalizar con la del verdadero atleta más rico de todos los tiempos: Cayo Apuleyo Diocles, un popular deportista originario de una provincia del imperio Romano que vivió en el siglo II y amasó una riqueza casi cinco veces más grande que la de Michael Jordan.
Una celebridad de la Roma antigua
Cayo Apuleyo Diocles nació cerca del año 104, en Lusitania, actual Portugal. A los 18 debutó como auriga, es decir, un conductor de carros tirados por caballos. Las carreras de caballos eran espectáculos muy populares entre la población romana que asistía al circo. Gracias a su habilidad con las cuadriga (carros tirados por cuatro caballos) en tan solo dos años Cayo Apuleyo se convirtió en una celebridad.
De acuerdo con Juan Antonio Jiménez Sánchez, de la Universidad de Barcelona, en la pista competían cuatro equipos: blancos, rojos, verdes y azules. El lusitano corrió para las facciones blanca, verde y roja. Esta última fue con la que se mantuvo la mayor parte de su carrera, la cual, según Peter T. Struck, de la Universidad de Pensilvania, duró 24 años.
En ese tiempo, el auriga acumuló un total de 35,863,120 sestercios en premios. La cifra la conocemos gracias a una lápida erigida en el año 146, como homenaje a sus logros, en el Circo de Nerón, un recinto que estaba ubicado en lo que hoy es la Ciudad del Vaticano. De acuerdo con Struck, esta suma actualmente equivaldría a cerca de 15,000 millones de dólares.

Las fuentes que nos hablan sobre Cayo Apuleyo Diocles
La mayoría de los datos que nos han llegado sobre la vida de Cayo Apuleyo Diocles se los debemos en concreto a dos fuentes. La primera y más extensa es la lápida antes mencionada. Esta, además, nos menciona la edad exacta de su muerte: 42 años, siete meses y 23 días.
En la inscripción también se detalla que el auriga participó en nada menos que 4,257 carreras, de las cuales ganó 1,462. Las demás las terminó en segunda posición, o en su defecto, entre los cuatro primeros. Se narra también que llegó a conducir carros de hasta siete caballos y que en muchas ocasiones acostumbraba salir en última posición para después remontar, algo que hacía en pos de espectáculo.

Otras de sus hazañas consistieron en ganar dos veces en un mismo día, algo sorprendente, pues en esas carreras los aurigas corrían el riesgo de morir debido a que la velocidad alcanzada por los caballos hacía volcar el carro. Como los aurigas llevaban las riendas atadas al cuerpo, terminaban arrastrados por sus propios corceles o fallecían pisoteados por los cascos de los caballos rivales.
La otra fuente que nos habla del deportista es una ofrenda hallada en el templo dedicado a Fortuna Primigenia, en el municipio del Lazio, Roma. Esta nos permite saber que el auriga tuvo dos hijos: Cayo Apuleyo Nimfidiano y Nimfidia. Asimismo nos confirma que era "hispano de nación".
Imagen de portada | Wikimedia Commons
Ver 0 comentarios