Es lógico pensar que Apple está trabajando ya en su nuevo iPhone, pero no tanto es pensar que para enero recibiremos un nuevo modelo de este teléfono con pantalla de 4 pulgadas y un nuevo diseño.
El analista Ming-Chi Kuo, que ha tenido algunos aciertos en sus revelaciones sobre los planes de Apple, asegura que la empresa de Cupertino presentará a principios del próximo año un nuevo iPhone con pantalla de menor tamaño respecto a los últimos modelos, pero con un diseño ligeramente parecido.
Kuo dice que el teléfono tendrá un cuerpo confeccionado en metal, pero estará disponible en varios colores. De su diseño, afirma que el cristal frontal tendría ligeras curvas en su perímetro, algo que ya vimos en los iPhone 6/6s. Su SoC sería el mismo que hoy lleva el modelo 6s, un chip A9, acompañado de NFC compatible con Apple Pay. No traería soporte para 3D Touch, y en su apartado fotográfico encontraríamos el mismo sensor que se le montó al iPhone 5s.
En resumen, el smartphone sería un modelo "económico". De hecho se rumora que su precio rondará entre los 400 y 500 dólares, por lo que podría ser un sustituto del iPhone 5s en el actual catálogo de la compañía.
Los informes de este analista no han sido cien por ciento certeros, pese a ello, analizando los movimientos anteriores de Apple vemos, a este modelo como un posible lanzamiento. Recordemos que la compañía ha intentado tener en su catálogo un modelo "económico" (sí, entre comillas), así que una renovación de éste es totalmente lógica, aún y cuando sus ventas fueron significativamente inferiores a las de los modelos insignia.
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