Elon Musk quiere despedir al 75% de los empleados si compra Twitter: los trabajadores dicen que es imprudente y una intimidación

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Actualización, 27 de octubre: en una visita a las oficinas de Twitter, Musk aseguró a empleados que ya no planea despedir al 75% de la plantilla laboral de la red social.

Luego de que Elon Musk diera a conocer que una vez que sea concretada la compra de Twitter despedirá al menos al 75% de la plantilla laboral, los empleados de la red social han salido a protestar, calificando la adquisición y el posterior recorte de personal como "imprudente".

De acuerdo con Time, que revisó una carta abierta que circuló entre los empleados, el documento señala que el plan para despedir a los empleados "dañará la capacidad de atender a la conversación pública", pero también afectaría la confianza tanto con clientes y usuarios, siendo también un "acto transparente de intimidación a los trabajadores".

En la carta, se exige que Musk se comprometa a mantener la plantilla actual de Twitter si termina por adquirir a la compañía, que no se discrimine a los trabajadores por sus creencias políticas, a mejores indemnizaciones justas y comunicación sobre las condiciones laborales.

Los empleados de Twitter también plasman en la carta su preocupación sobre el "peligro" en el que se encuentra la conversación pública, pues los despidos afectarán cómo la red social impacta en las sociedades y comunidades en el mundo.

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Para ejemplificarlo, los firmantes toman el caso de Ucrania e Irán, donde su plataforma ayuda a elevar el periodismo independiente, pero también a impulsar movimientos sociales en el mundo.

Musk, la compra, la demanda y sus promesas

Al momento de escribir este post, la adquisición de Twitter por parte de Musk se debe completar el viernes 28 de octubre, o de lo contrario se tendrá que enfrentar a la reanudación de una demanda por parte de un tribunal de Delaware.

El magnate además de criticar "la falta de transparencia" de la plataforma para revelar sus verdaderos datos sobre bots y cuentas de spam, también ha apuntado a que los números de la red social estaban "inflados" y debía pagar menos por cada acción, y hasta señaló que su fuerza laboral tenía "un fuerte sesgo de izquierda".

Recordemos que en sus intenciones originales, Musk detalló que la plataforma tendría un algoritmo de código abierto para que los usuarios puedan entender si sus publicaciones han sido degradadas o promocionadas y que no se piense que los temas de conversación se manipulan.

Además de evitar las estafas de criptomonedas, uno de los principales puntos de enfoque para Musk pasaba por ""respetar la libertad de expresión" pues en múltiples ocasiones mencionó que era algo esencial para que la democracia funcionara, respetándose las opiniones de los demás.

Imagen: Steve Jurvetson y Christopher

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