Las apps de transporte privado y comida comenzarán a retener los impuestos de los chóferes en México: esto es lo que sabemos

Las apps de transporte privado y comida comenzarán a retener los impuestos de los chóferes en México: esto es lo que sabemos
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MartinPixel

Editor Senior

He jugado videojuegos desde que tengo memoria, apasionado de la tecnología y desde hace poco del comercio electrónico y los servicios de streaming. Soy un afortunado por ser parte del equipo de Xataka México y siempre dedico mi máximo esfuerzo en todas las publicaciones del sitio. LinkedIn

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Servicio de Administración Tributaria (SAT) han trabajado en un esquema para la retención de impuestos a los ingresos de los conductores que de las plataformas digitales de transporte y de comida en México. El objetivo es que todas las empresas se hagan responsables de sus obligaciones fiscales.

La SHCP reconoció a las plataformas digitales Uber, Cabify, Bolt, Beat, Cornershop, Rappi, Sin Delantal y Uber Eats que participaron en el anuncio de colaboración para el cumplimiento de sus obligaciones fiscales. La primera fase de la retención iniciará a partir del 1 de junio y es dirigida para los servicios mencionados anteriormente.

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No se verán afectadas las tarifas

En entrevista con El Financiero, Víctor Díaz Infante, director fiscal de Uber México, mencionó que esas obligaciones fiscales ya las cumplen, los 250,000 socios conductores activos en México con el pago del ISR, mientras los usuarios con el IVA, aclarando que ese último no se mostraba en el desglose de los viajes, a menos que se requiera factura.

Indicó que los impuestos no harán que se suban las tarifas, lo único que hará Uber en este caso, será hacer la declaración mensual a los socios, además de retener una tarifa para hacer el pago ante la SHCP. Con ello, Hacienda podrá realizar la retención del IVA de 8%, mientras el ISR podrá variar de 3 a 9%, dependiendo de los ingresos que genera cada conductor.

Díaz señaló que lograron una tarifa reducida del ISR para los conductores, además de hacerse cargo de todo el tema administrativo.

Federico Romero, presidente de Uber y Uber Eats, comentó que uno de los beneficios que recibirán los trabajadores de las plataformas, es que al cumplir sus obligaciones fiscales, tendrán acceso a los servicios de salud del Instituto Mexicano del Seguro Social. También señaló que contaran con acceso a constancias fiscales que les permitirá acceso a servicios financieros como un crédito hipotecario.

Por su parte DiDi informó que no se unirán al esquema de retención para las plataformas móviles por el momento. Mencionan que no realizarán retenciones de impuestos y estarán analizando su participación después de conocer las implicaciones para los socios conductores.

Hasta nueve años de prisión por no pagar impuestos

Entre las obligaciones fiscales que refiere el programa de retención de impuestos, señalan que los contribuyentes que residan en territorio mexicano o los residentes extranjeros que tengan ingresos procedentes de fuentes de riqueza situadas en México, deberán pagar el Impuesto Sobre la Renta (ISR).

El otro será al Impuesto al Valor Agregado (IVA) que debe ser retenido para las personas físicas o morales que adquieran bienes o los usen o gocen temporalmente, que enajenen u otorguen residentes en el extranjero sin establecimiento permanente en el país, indicó el comunicado.

La Procuraduría Fiscal de la Federación señaló que la erogación del gasto público se encuentra establecida en el artículo 31, fracción IV, de la Constitución Federal, mencionando que aunque los domicilios fiscales se encuentren fuera del territorio nacional, no exime a las empresas del pago de ciertas contribuciones.

El incumplimiento de una obligación fiscal por parte de algún contribuyente con residencia en el extranjero, podrá ser sujeto a un proceso penal por algún delito fiscal, donde se tiene prevista una pena de hasta nueve años de prisión, además de la obligación de cubrir el monto de lo defraudado, incluyendo actualizaciones y recargos.

Imagen | NYT

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