Hugo López Gatell, subsecretario de Salud ha confirmado que que hasta ahora hay 21 casos de hepatitis aguda infantil en México, 17 en estudio, más los cuatro dados a conocer el pasado 12 de mayo en Nuevo León.
El funcionario informó que hasta ahora todos los datos sugieren que "no es una enfermedad de rápida propagación", sin embargo desde principios de mayo se emitió un aviso epidemiológico en el país para que se puedan identificar los posibles casos, enviando las muestras para su análisis al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE).
Gatell también mencionó que hasta ahora no se cuenta con evidencia para confirmar o descartar la causa de esta hepatitis, por lo que no se puede asegurar sea infecciosa, pero tampoco es posible negarlo, y no hay acciones que se deban tomar de forma específica para su prevención.
Por lo pronto se cuenta con casos registrados en Durango, San Luis Potosí y Sinaloa, además de Nuevo León, ya que tras el aviso epidemiológico nacional las unidades de salud comenzaron a estudiar y analizar los casos que coinciden con la sintomatología.
Medias preventivas, síntomas y vacunas
Por lo pronto, no hay una vacuna específica para este tipo de hepatitis y todavía están por determinarse las causas exactas que la generan, aunque las hipótesis más generalizadas apuntan a un adenovirus o como una secuela del contagio por COVID en menores de edad.
Entre los síntomas que tiene este nuevo padecimiento se encuentran los gastrointestinales, como la diarrea o el vómito, fiebre y hasta dolor muscular y articular, además de la ictericia.
Entre las medias recomendadas hasta ahora están las medidas básicas de higiene, como lavarse frecuentemente las mano y cubrirse al toser y estornudar. Incluso otras precauciones van desde evitar compartir alimentos y utensilios de comida, así como evitar contacto cercano con personas enfermas, completar el esquema básico de vacunación y manejar correctamente alimentos y excreciones.
Imagen: Volodymyr Hryshchenko en Unsplash
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