Una demanda antimonopolio contra Meta, presentada por Sarah Grabert y Maximilian Klein, acusa a Facebook de permitir que Netflix lea los mensajes privados de los usuarios.
De confirmarse la acusación, sería uno de los escándalos más grandes asociados con Meta desde el escándalo de Cambridge Analytica. Sin embargo, Meta ha declarado su postura frente a la acusación, calificándola como "falsa".
La nueva acusación antimonopolio dice que Meta permitió que el aparato de análisis de datos e información de Netflix tuviera acceso a los mensajes privados de los usuarios de Facebook con el objetivo de realizar mediciones acerca del impacto de sus producciones.
De acuerdo con los documentos legales citados por diversos medios estadounidenses, como Fox Business, este acceso habría estado disponible para Netflix desde agosto de 2013, permitiendo que leyeran durante más de 10 años los mensajes de la comunidad de Facebook.
Según los demandantes, Netflix también habría tenido la posibilidad de mandar mensajes directamente a los usuarios y tener registro de las interacciones de los usuarios en dichos mensajes.
La negativa de Meta
Por su parte, Meta negó haber compartido los mensajes privados. La posición de la compañía es que sí acordaron cierto acceso por parte de Netflix a la API de mensajería de Facebook, pero en el sentido de que los usuarios de ambos servicios podían compartir recomendaciones y lo que estaban viendo en Netflix con sus contactos de Facebook directamente desde la aplicación de la compañía de streaming.
Esto significa que ambas aplicaciones estaban, en cierto modo, ligadas. De tal manera que dentro de la app de Netflix puedes compartir en Messenger de Facebook cualquier contenido que estés viendo. Sin embargo, esto es algo que también se puede hacer en otros servicios de mensajería.
De ese modo, Netflix jamás habría tenido acceso a los mensajes escritos por los usuarios. Sin embargo, al poder compartir recomendaciones desde Netflix a través de Facebook, la gigante del streaming podía medir el rendimiento de dichas recomendaciones a los destinatarios.
A todo esto se suma la cercana relación que Netflix tiene con Meta pues, desde junio de 2011 y hasta mayo de 2019, Reed Hastings formó parte de la junta directiva de Facebook. La demanda presentada por Sarah Grabert y Maximilian Klein argumenta que Hastings fue el principal responsable de que Facebook Watch, servicio de streaming con el que coqueteo Meta por un tiempo, fuera cortado pues se presentó como una alternativa a Netflix.
Además, se especula con que Netflix tiene una posición privilegiada dentro del sistema de anuncios de Meta, incrementando su posición y exposición hacia el público de Facebook.
Netflix, Meta y otras gigantes tecnológicas en la mira del Departamento de Justicia
Esta es solo una de varias acusaciones antimonopolio que han estado saliendo a la luz durante los últimos años contra las grandes compañías. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos ha impulsado una serie de demandas contra las empresas tecnológicas más grandes del mundo. Apple fue la última en enfrentarse al gobierno estadounidense.
El caso Apple es todo un evento, pues es la compañía mejor valuada en el mundo y también originaria de Estados Unidos. Enfrentarse a su propio país es, sin lugar a dudas, un momento tan histórico como cuando Mark Zuckerberg fue llamado al congreso estadounidense.
De momento, no está claro si Netflix tuvo o no acceso a la mensajería privada de los usuarios de Facebook y, de confirmarse, Meta seguramente se vería en claros aprietos con el gobierno de Estados Unidos. No estoy para nada al tanto de cómo se calculan las multas a este tipo de compañías, pero seguramente no le saldría nada barato al bolsillo de Mark Zuckerberg.
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