El estrés forma parte de nuestra vida diaria, pero se puede volver sumamente complicado cuando estamos hablando del desgaste laboral. Puede que pienses que esa sensación viene de tus compañeros, de la forma de ser de tu jefe o del entorno donde laboras. Sin embargo, un nuevo estudio encontró una fuente de estrés a la cual no se le había puesto mucha atención, hasta ahora.
De acuerdo con una investigación dirigida por la profesora Stacey Parker, psicóloga de la Universidad de Queensland, el estrés laboral tiene una vertiente compleja y no tan estudiada: las interrupciones y solicitudes de labores que el empleado considera inútiles o fuera de sus responsabilidades.
La misma Dra. Parker dio declaraciones para Phys.org, donde comenta que hay un tipo de interrupción laboral en particular que incrementa exponencialmente el estrés en los trabajadores y, por ende, afecta su rendimiento:
"Si una persona es interrumpida para pedirle que complete una tarea que percibe como ilegítima, que no tiene sentido o está fuera de sus responsabilidades, descubrimos que su desempeño se ve comprometido. [...] La gente cree que estas interrupciones obstaculizan el progreso en su trabajo habitual, lo que puede provocar un aumento de la ansiedad y dificultades cognitivas".
- Stacey Parker
Según el artículo, una tarea ilegítima se considera de esa manera no por su calidad intrínseca, sino por la percepción que el empleado le da a la misma. Debido a este tipo de tareas, los trabajadores pueden sentir que su identidad laboral está en juego o que no son solicitudes razonables. Uno de los ejemplos dados es el de pedir a un asistente administrativo que cuide niños o que organice revistas.
En el fondo, parece que la ilegitimidad proviene de la percepción que el empleado tiene de su trabajo. Si siente amenazada la imagen que tiene de su trabajo, se puede llegar a truncar el buen progreso de las tareas. Además, este tipo de tareas pueden considerarse incluso un mensaje social que falta al respeto, pues se pueden interpretar como un menosprecio a las funciones del empleado.
Mitigando el impacto
Asimismo, el estudio encontró que este tipo de acciones incrementan la ansiedad dentro del entorno de trabajo. La recomendación que se le da a las empresas para prevenir este tipo de secuelas es que, si es imposible eliminarlas, los supervisores deben reconocer su ilegitimidad. El respeto y aprecio por los empleados puede ayudar a mitigar los efectos negativos.
Encontrar una manera de minimizar la asignación de tareas de este estilo es todo un reto para los directivos. Si se pretende tener un lugar de trabajo que rinda al 100% de sus capacidades, es menester tener una moral alta y que los empleados sientan que lo que están haciendo tiene importancia.
Sea como fuere, este tipo de estudios pueden apoyar la creación de entornos laborales más saludables. Encontrar distintas fuentes de estrés y ansiedad para los empleados siempre ayuda a formular contraestrategias para mitigar su impacto. Se trata de encontrar el balance necesario para tener un equipo de trabajo contento con lo que está haciendo, para entregar trabajos de calidad.