¿Qué harías con un millón de dólares? ¿Y si con ese dinero pudieras cambiar el mundo? Se puede ganar dinero y seguir luchando por hacer de éste un mundo mejor, ya sea por un consumo más eficiente de los recursos naturales, para ayudar a personas con ciertas necesidades especiales o para cualquier otro tipo de propósito.
Los emprendedores sociales son personas con soluciones innovadoras a los problemas más acuciantes de la sociedad. Son ambiciosos y persistentes, abordando los principales problemas comunitarios y ofreciendo nuevas ideas para el cambio a gran escala.
¿Cuál es el perfil de la empresa social?
Según un estudio de Social Enterprise del Reino Unido (Seuk), casi la mitad (49%) de todas las empresas sociales tienen cinco años de edad o menos y el 35% menos de tres años. Además, la proporción de empresas sociales que crecieron su volumen de negocio en los últimos 12 meses es del 52% y la mitad de ellas declara ganancias, con un 26% de estas nuevas empresas el punto de equilibrio entre pérdidas y ganancias. Cabe señalar que la mayoría de esos beneficios se utilizan para alcanzar sus objetivos sociales o ambientales.
Además, aunque muchas de estas empresas puedan nacer con vocación local, lo cierto es que cada vez son más el número de empresas que exportan o licencian su negocio (un 14%). De las que lo hacen, en una de cada tres el comercio internacional representa entre 11% y 50% de los ingresos totales.
El 27% de las empresas sociales tienen en el sector público su principal fuente de ingresos y casi 6 de cada 10 (59%) de las empresas sociales hacen algunos negocios con el sector público.
Y, sin embargo, son pioneras e innovadoras por definición: mientras que el número de empresas sociales que introducen un nuevo producto o servicio en los últimos 12 meses ha aumentado hasta el 59%, en el resto de las PYME este dato ha caído al 38%.
Trabajadores y líderes
Este mismo informe pone de manifiesto que los emprendedores sociales se caracterizan por tener un liderazgo inclusivo y diverso: el 40% de las empresas sociales están dirigidas por mujeres; 31% tiene como directores alguna minoría étnica y el 40% tiene un director con una discapacidad.
Pero, además, son creadores de empleo: el 41% de las empresas sociales crean puestos de trabajo en los últimos 12 meses en comparación con el 22% de las pymes. Y no es cualquier tipo de empleo, ya que casi 6 de cada 10 (59%) empresas sociales emplean al menos una persona que está en desventaja en el mercado laboral. Para el 16% de las empresas sociales, este grupo representa al menos la mitad de todos los empleados.
Eso sí, el 44% de las empresas sociales ha buscado financiación en los últimos 12 meses y el 39% cree que la falta de disponibilidad de crédito es una barrera para su sostenibilidad. Mientras, sólo 5% de las pymes piensan que la falta de acceso a la financiación es una barrera para su negocio.
Qué quieren estos emprendedores
Aunque muchos de estos proyectos sociales nacen con vocación local, cada vez son más los emprendedores sociales que hacen buena parte de su negocio a nivel internacional
Es cierto que muchas nuevas empresas nacen como vocación para solucionar un problema existentes. Ese problema se puede inscribir, en muchas ocasiones, en el ámbito laboral para poder ser más productivos. Pero en otras ocasiones responde a otro tipo de problemática. Por ejemplo, quienes proponen las bicicletas como sistema alternativo e incluso hacen aplicaciones que nos motivan a utilizar este medio de transporte más ecológico y menos contaminante con recompensas por cada emisión menos de CO2 que lanzamos al utilizar los pedales frente a un vehículo a motor. Sin embargo, en ciertas ocasiones puede parecer que los fondos de inversión y los bancos solamente nos ofrecerán dinero si montamos un negocio que consiga ganar cada vez más dinero. Y pese a lo que pueda parecer, montar un negocio social no está reñido con generar ingresos.
Los emprendedores sociales intentan buscar soluciones a necesidades de la sociedad, en lugar de dejar que estas problemáticas sean atendidas por los gobiernos o las fundaciones. Intentan buscar el origen de por qué no funcionan algunas cosas y plantean un modo de resolver cada problema.
Un cambio necesario
Los emprendedores sociales son un agente necesario de cambio para la sociedad. Como buenos emprendedores, saben aprovechar las oportunidades que otros no ven son el fin de mejorar la sociedad, plantear nuevos enfoques a las situaciones y desarrollar soluciones innovadoras que pueden cambiar la sociedad y hacer que avance en todos los sentidos y para todos los públicos.
La iniciativa The Venture lo que busca es, precisamente, ayudar a estos emprendedores con estas ideas originales para combinar estas dos vertientes: la posibilidad de hacer un negocio y, al mismo tiempo, que esta idea tenga un fuerte compromiso social que mejore la sociedad en que vivimos.
Se trata de una iniciativa mundial puesta en marcha por Chivas que pretende, con un millón de dólares en financiación y el asesoramiento de expertos, ayudar a quienes tienen un proyecto para construir un mundo mejor. Todas las start-ups que buscan generar un impacto positivo en su comunidad han podido apuntarse en este reto, que ya tiene 5 seleccionados para competir en la final nacional que se va a celebrar el 25 de noviembre. El proyecto que resulte ganador en México tendrá la oportunidad de ganar una parte de ese millón de dólares que The Venture tiene presupuestado a nivel global.
En su primera edición del pasado año se apuntaron a este reto más de mil emprendedores y 16 quedaron finalistas. Dado el éxito de esta primera edición, ahora está en marcha la segunda.
No es la primera vez que Chivas organiza The Venture. En 2014 se lanzó la primera edición de este programa, que se cerró con un gran éxito. Ahora está en marcha la segunda edición de esta competición, con la que se pretende dar una oportunidad a esta nueva generación de emprendedores y que puedan ver cumplido su sueño.
El objetivo de The Venture es ayudar a estos emprendedores sociales a hacer realidad su sueño de montar una empresa (rentable) con un fuerte compromiso social
Como todo concurso de emprendedores, quienes se presenten deberán defender su proyecto y la viabilidad del negocio que plantean, aunque lo económico no sea el gran desafío.
Quienes logren convencer al jurado recibirán su correspondiente formación con otros emprendedores, asi como los consejos de empresas tecnológicas, con el fin de que puedan dar viabilidad a su proyecto.
Cabe recordar que el año pasado más de 1.000 jóvenes emprendedores de países como México, Brasil, China, Reino Unido, Estados Unidos y Sudáfrica se apuntaron al reto de The Venture .
Así pues, si tienes una idea con la que crees que se pueden cambiar las cosas a mejor, te animamos a que te presentes a la próxima edición. The Venture es el foro ideal para que alguien te escuche y valore si tu idea puede ser la punta de lanza de un cambio que muchos están reclamando.
Según un estudio sobre el emprendimiento social, los emprendedores sociales son, en sí mismos, más creativos que otros empresarios, el gobierno y la sociedad civil y, aunque eso no significa que sean más eficaces, sí que suelen tener ventaja cuando se compara la solución específica que proponen para determinado tipo de cuestiones con respecto a los demás.
La actitud del emprendedor social aprovecha estas ventajas y ve soluciones allí donde otros ven problemas. Esto, combinado a su capacidad para rentabilizar un proyecto orientado a la mejor a de las condiciones sociales de sus diferentes entornos, los convierte en elementos fundamentales de cualquier tejido social y económico.
