A finales de 2021, la economía de Dinamarca comenzó un incremento desatado tras el éxito de su industria farmacéutica. La principal responsable: Ozempic. El producto estrella de Novo Nordisk, el cual promete y aparentemente ha demostrado lograr que sus consumidores bajen de peso hasta en un 15%.
Ozempic ha logrado representar el 5% del PIB de Dinamarca tras casi dos años desde su lanzamiento. Sin embargo, un alza tan importante en la economía de un país siempre representa un temible riesgo de caída, sobre todo cuando todo se sostiene en un solo sector. La gran demanda de Ozempic ha generado un impulso realmente significativo que podría darnos pistas de las flaquezas de la economía del país escandinavo.
El mercado farmacéutico es uno de los principales motores de la gesta económica de Dinamarca, pero no fue sino hasta la entrada de Ozempic que las cosas se pusieron serias. Actualmente, Novo Nordisk es la empresa más valiosa por capitalización bursátil de toda Europa, superando a la conocida LVMH Moët Hennessy Louis Vuitton.
Pero, ¿qué es Ozempic?
Este producto es un fármaco destinado a apoyar al tratamiento de la obesidad y diabetes tipo 2, el cual contiene un químico llamado semaglutida. Dicho componte, fue desarrollado desde 2012 por Novo Nordisk, pero no fue hasta 2017 que fue aprobado para su uso común y hasta 2021 que su boom comenzó. Su éxito fue tan rotundo que incluso el siempre polémico Elon Musk declaró que estaba tomándolo, entre otros tantos famosos que también admitieron estarlo tomando. Durante la gala de los Oscar en 2023, Jimmy Kimmel bromeó al respecto diciendo: “Veo alrededor de esta sala y no puedo evitar preguntarme, ¿necesito tomar Ozempic?”.
Sus números no hacen más que crecer y según las estimaciones de FactSet, se espera que Novo Nordisk venda hasta 6 mil millones de medicamentos durante 2023, llegando a un tope anual de 15 mil millones de ventas para 2027.
Pero, pese a su innegable éxito y prominente futuro, Ozempic puede estar llevando a la economía danesa por un camino riesgoso. Mientras mayor sea la contribución de una sola compañía a la moneda de un país, con más peligros se puede ver enfrentada su estabilidad financiera. Entre los casos similares a Novo Nordisk, podemos pensar en la empresa finlandesa por excelencia, Nokia. Durante la década de los noventas e inicios del 2000, esta compañía levantó como nunca antes a la economía de Finlandia, pero tras su caída, la situación monetaria del país cayó con ella.
La maldición de innovar
En conversación con Bloomberg, Mathias Dollerup Sproegel, economista senior en Sydbank, comenta que:
“es un problema de lujo que solo acarrean las compañías realmente innovadoras que logran vender demasiado. Pero hay un riesgo si Novo no puede manejar ese crecimiento, si no puede mantenerse a la vanguardia o si Estados Unidos implementa un restricción de precios en los productos, podría traducirse en una enorme presión para la economía danesa”.
Además, siempre hay alarmas por el consumo excesivo y no regulado de cualquier tipo de medicamentos. Ya se han registrado efectos alternos como la afección tiroideo y la probabilidad de aumentar el riesgo de tumores para cierto grupo de personas con predisposición genética a ciertas condiciones médicas.
Sea como fuere, Ozempic se planta como uno de los productos mejor valorados en el mercado y, por lo tanto, más codiciados. El futuro nos dará la respuesta en cuanto a si Dinamarca sufre una caída similar a la de Finlandia tras el colapso de Nokia o si, por el contrario, Novo Nordisk logra mantenerse como un bastión económico sólido no solo para su país, sino para toda Europa.