La respuesta a la existencia de vida fuera de la Tierra puede estar directamente en los anillos de Júpiter y Saturno

Anillos Saturno
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Hablar de la existencia de vida más allá de la Tierra siempre suele apuntar a un planeta en particular: Marte. Sin embargo, los científicos cada vez están más seguros de que hay posibilidades de que, si hay extraterrestres, estos habiten otras regiones del sistema solar. No obstante, hay un problema muy específico: el agua.

De acuerdo con Space, para sustentar la vida tal y como la conocemos, se requieren tres elementos clave: una fuente de energía que proporcione calor y luz, material orgánico con compuestos de carbono para formar seres vivos, y la existencia de agua líquida no congelada como se suele encontrar en la Luna y en cometas distantes.

Más allá de la Tierra, dos de estos elementos se pueden encontrar en los anillos de Saturno, pues hay luz y compuestos orgánicos, pero falta el agua líquida, a pesar de que hay agua congelada.

Para el científico planetario del Instituto SETI, Matthew Tiscareno, esto es un problema, pues hace que la vida sea difícil en cualquiera de los anillos del sistema solar. Están demasiado lejos y fríos para que el hielo de agua se derrita, aunque plantea que, en caso de que en otro sistema estelar estos se ubiquen más cerca del Sol, entonces podría haber agua en el estado necesario.

Sin embargo, también hay otro problema adicional. En caso de que el agua fuera líquida, no podría mantenerse en el espacio, pues sin atmósfera esta tiende a evaporarse. De lo contrario, se comportaría de la misma forma que los cometas.

Cometa 01

Aun así, Tiscareno no da por cerrada la posibilidad de que exista vida en un entorno como este, al punto de afirmar: "Me gusta la idea de pensar en lugares recreativos donde podría haber vida".

La importancia de los anillos planetarios

Aunque no se estudien específicamente para buscar vida, los anillos de los planetas son un objeto de interés para los astrónomos, pues permiten conocer los planetas anfitriones de formas únicas, por ejemplo, cuando un meteorito choca contra sus anillos.

Este elemento adicional sirve para entender mejor el planeta, la forma en que evolucionó y cuáles fueron las condiciones que los llevaron a desarrollarse de esa forma, y convertirse en las estructuras que los astrónomos estudian.

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