El café podría ser fundamental para comprender el envejecimiento de nuestros músculos y cuerpo en general. Un reciente artículo apunta a que, dentro de este líquido que forma parte del día a día de millones de personas alrededor del mundo, puede estar la clave para combatir la sarcopenia.
Esta popular bebida ha sido objeto de estudio constante, tanto para conocer sus beneficios para la salud como para entender sus contras. En esta ocasión, se realizó una investigación para comprender más a fondo la trigonelina, un alcaloide de sumo interés por sus implicaciones contra el envejecimiento.
De acuerdo con lo encontrado por el equipo de investigación liderado por Mathieu Membrez, se identificó a la trigonelina como precursora del NAD+ (dinucleótido de nicotinamida y adenina), un componente que mejora la función muscular durante el envejecimiento. El estudio indica que los niveles de trigonelina caen a puntos mínimos en personas con sarcopenia.
¿Y qué es la sarcopenia? De acuerdo con datos del National Cancer Institute de Estados Unidos, se trata de una enfermedad que provoca la pérdida gradual tanto de masa como de fuerza en los músculos de adultos mayores. Este trastorno también se relaciona de manera directa con una mayor probabilidad de caídas, fracturas o disminución de la movilidad.
De esa manera, los niveles de NAD+ ayudan a combatir la disminución provocada por la sarcopenia. Los niveles de trigonelina podrían servir también como una métrica médica para comprender mejor el desgaste muscular en los ancianos.
El café como punto de partida
Aunque la investigación encontró que en el café se pueden encontrar tanto trigonelina como vitamina B3 (importante para el sistema nervioso, digestión y salud de la piel), no se propone su ingesta para superar o combatir la sarcopenia. Más bien se señala como una apertura a nuevas investigaciones para comprender aún mejor el papel de este alcaloide en el tratamiento de dicho trastorno.
El artículo señala que una alimentación adecuada, sumada a la actividad física, son dos de las principales barreras que se pueden colocar ante la sarcopenia para retrasar su avance. De hecho, recientemente hablamos acerca de cómo las dietas ricas en proteínas de origen animal pueden contribuir enormemente a la salud de los adultos mayores.
Según información del National Institutes of Health, la sarcopenia es una enfermedad que afecta entre el 5% y el 13% de las personas mayores de 60 años. Es una cifra nada despreciable que provoca la necesidad de buscar alternativas para mejorar la vida de aproximadamente 1,400 millones de adultos mayores en el mundo.
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